Mesa para una

Así es señores y señoras ya está de vuelta esta bonita y letrada sección de PIERNAS Y RESEÑAS y me da mucho gusto porque el libro que les presento es lo más divertido y se titula Mesa para una escrito por Caro Saracho por ahí del 2018, pero en mis manos cayó por ahí de junio de 2019; año en el que libraba mi segundo año en el mercado de la soltería, así es señores y señoras la soltería es un mercado. Total, que ahí estaba yo con mi segundo año reinsertada en el mercado y la verdad es que no la estaba pasando nada bien, las razones a continuación:

1.- No sabía qué hacer conmigo.

2.- Me relacioné con varios personajes a los que llamaremos “dones”, así es y la lista la encabezaba Don Pendejo, seguido de Don Chile para terminar con Don Beso, estos dones figuraron en mi radar desde mi nueva soltería haciendo de mi vida un verdadero tormento emocional.

Y en esa tormenta me cayó el libro y me di cuenta de que aunque yo decía que estaba súper bien, la verdad es que no lo estaba y no tanto por mí, aunque era yo quien escogía al final a los dones, sino porque las opiniones externas influían en mí para querer estar en la anhelada vida de pareja viendo Netflix, yendo al super, hacer actividades en pareja y fue hasta un día que de plano me di cuenta de que todas esas actividades sí la realicé en pareja en alguna ocasión y no estuvo así que ustedes dijera “WOOOOOW” al contrario sentía culpa todo el tiempo que no estaba con mi pareja en turno, así que me dediqué a verle el lado bueno a mi soltería y descubrí:

 

1.- Que mis horas eran todas mías, cada minuto, cada segunda era mío.

2.- Disfruté entrenar para mi maratón.

3.- Disfruté salir arreglada SOLA.

4.- Tomé todos los talleres que me dieron la gana.

5.- La culpa se fue por completo.

6.- Mantenía TedTalks con mis amigos con todo el placer del mundo a la hora que fuera.

7.- Escribía por horas sin tantita pena.

 

Dejemos de lado como describe Caro en su libro, llegar sola/o a una boda o a un evento cualquiera, es la cosa más espantosa porque las mujeres no te hablan mucho y los hombres menos porque están vigilados por sus mujeres, no entiendo porque los organizadores no se las arreglan para en las bodas sentar a todos los solteros juntos, o sea, ahí está la siguiente boda ¡Visión, señores, visión! En fin, sin importar la edad, pero si pasas los treinta, sigues soltera el mundo cree que tienes algo mal y pensemos bien solteros del mundo, ¿A realmente es molesto estar soltero? A mí no me molestaba mucho dormir hasta tarde, tener mi propio horario, comer lo que yo quisiera, más bien dejaba que me molestaran los comentarios externos, pero yo estaba tranquila mientras pudiera hacer lo que me diera la gana y llegó un momento en el que me resultó tan bella mi soltería que se volvió adictiva y es que ya estaba yo tan confundida por los dones y los no dones que necesité un momento de real introspección para determinar qué es lo que quería y cómo. Ahora que decidí, porque es una decisión, tener pareja me resulta gracioso que todo lo que aprendí estando sola es a ser mejor pareja conmigo y con quien decido compartir ese espacio de mi vida. Aprendí que el estado civil es lo menos importante en cualquier ámbito de la vida, que de verdad es una pregunta que el mundo puede dejar de indagar que, si hay algo importante en el ser humano, es eso, ser humano y que sola o en pareja estoy contenta porque lo estoy ahora conmigo misma.

 

Acá los links de Mesa para una, de la autora Caro Saracho y como en cada publicación, por favor #QuedateEnCasa.

 

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Enseñanzas de ANA GORDA

Y bueno continuando con el relato de ANA GORDA y sus enseñanzas, les cuento todo lo que aprendimos en esa producción tanto Netzeri Romero y una servidora.

1.- La publicidad no se inicia el día del estreno. Así como lo leen, la producción de ANA GORDA inició campaña publicitaria el día del estreno y ¿por qué? Pues porque teníamos la cabeza en todo y en nada. Al ser una producción independiente que constaba, en un inicio de tres elementos: director, productora y actriz/dramaturga todo nos sobre pasó. El estreno estaba planeado para el día 2 de febrero y los ensayos iniciaron el 2 de enero y para mitad de enero sucede que yo todavía no tenía el texto al cien por cien y del trazo ni hablamos, pero bueno.

 

2.- No dejarle todo al Universo, ese compa tiene otras que hacer. Un día antes del estreno Netzeri y yo recorrimos varias tiendas buscando el mejor precio en vinos para el brindis. Muchos conocidos y amigos dijeron que irían y bueno nosotras todas positivas nos pusimos a energizar, más bien fantasear, que llegarían todos los que nos confirmaron e incluso pensamos en la posibilidad de que irían más y el teatro estaría llenísimo, la realidad fue la siguiente ¿han visto La la land la escena donde el personaje que interpreta Emma Stone se presenta en el teatro con una obra que ella misma escribió y cuando encienden las luces nomás ve a sus amigos? Ah, pus así merito sucedió. Nuestro estreno competía directamente con el Super Bowl y el día de La Candelaria, entonces ni cómo, pero bueno los más fieles estuvieron ahí y muchas gracias por eso.

 

3.- Jamás confiarle a la actriz/dramaturga el vestuario. Una función me di cuenta de que mi vestuario ya olía poquito a éxito de tantas presentaciones y me dije “lo voy a lavar” muy en mi papel de responsable me lo llevé y lo puse en la tintorería, aunque sí lo recogí e hice todo lo que correspondía debido a que una semana antes tuve que salir corriendo del lugar donde vivía porque el casero víctima del alcohol y sus nervios quiso golpearme, regresé al Albergue lo cual alteró mi rutina y ese jueves aunque llegué al teatro temprano a la hora de que llegué al camerino me di cuenta de que no tenía el vestuario como corresponde le llamé a la productora esperando un auxilio de su parte y su respuesta fue “SALES CON LO QUE TRAIGAS” y yo en shock.

 

4.- Leer tu propia publicidad. Al inicio las funciones eran los jueves y domingo, sin embargo, el dueño del teatro había ya hablado conmigo sobre que un jueves de febrero no tendría función por una razón que no recuerdo, el punto es que de los tres elementos que conformábamos en equipo ninguno, repito NINGUNO leyó que ese día no teníamos función. Fue por una publicación que hice en Instagram que el dueño del teatro me llamó y ahí a corregir.

 

5.- Confía en tu equipo. Como dije al inicio éramos tres elementos en la producción de ANA GORDA, sin embargo, por motivos personales y profesionales el director tuvo que retirarse y ahí entró Netzeri a tomar el puesto de directora/productora y todo lo que yo pueda escribir acerca del excelente trabajo que hizo en esta puesta en escena como directora, les juro, es muy poco. Desde el día uno que se integró al equipo se sumó de una manera extraordinaria, siempre con buena actitud, comprensión, compasión y eso se notó en el segundo mes de esta obra porque el desarrollo y complicidad que tuvimos solidificó nuestra amistad y yo nomás puedo decir ¡Netzeri para presidenta! 😎

 

6.- Los que restan se restan solos y los que suman, bienvenidos. Así como el director salió a media temporada fueron muchos los que se sumaron a este proyecto con sus consejos, su apoyo, sus observaciones y recomendaciones y a todos ellos ¡GRACIAS… TOTALES, OBVIO!

 

Son muchas más las anécdotas que Anita nos deja a Net y a mí, la complicidad y uno que otro pulque, sin embargo, nada de esto hubiera sido posible sin todas las personas que asistieron, incluso dos o tres veces, de todo corazón les agradezco a los que estuvieron en el brindar del estreno y en el brindis/pastel del cierre de temporada, que ahí sí hubo teatro lleno que le tocó vino y hasta pastel.

 

Ahí seguiré contándoles qué más con todo y les adelanto que vuelve PIERNAS Y RESEÑAS, poquito moreteadas porque pues los golpes de la vida en la escalera de mi nuevo hogar y por favor #QuedateEnCasa 😉

 

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#QuedateEnCasa

Han pasado ya varios meses desde la última publicación y en las novedades… La verdad es que ya no es novedad, estuve por casi dos meses en cartelera con la obra ANA GORDA, misma que escribí e interpreté todos los jueves y domingo de febrero hasta que un jueves no llegó nadie al teatro (ajá, así mero) y ahí tuve que tomar la decisión de irnos solamente un día a la semana: jueves. Sé que no es fácil de compartir este aparente fracaso, sólo que yo no lo veo como un fracaso; sino como una experiencia, además de la maestra Adriana Barraza aprendí que, así como contamos los triunfos es igualmente valido contar lo “malo”. El montaje de ANA GORDA me dejó el enorme aprendizaje de todo lo que usted no debe hacer a la hora de montar una puesta en escena y sin embargo contra todo pronóstico la obra resultó un gran éxito. Para mí fue un éxito rotundo porque sucedió, porque pararme en el escenario cada función resultó lo más excitante hasta el momento. Estar en el teatro después de mi horario de oficina en ese escenario cada jueves no fue sencillo y tampoco fue un trabajo en solitario, aunque era un monologo, tuve la fortuna de contar con el apoyo de muchas personas que creyeron no sólo en mi dramaturgia, sino en mi potencial como actriz, me mostraron con mucha compasión de lo que puedo ser capaz en un escenario, en la vida misma.

Después de mis vacaciones en Perú, me envolví en la aventura teatral durante los tres primeros meses de 2020 que me mantuvieron concentrada, nerviosa, estresada, cansada, entregada a un personaje que yo escribí y del que no entendía nada ¿raro? ¡Lo más raro! Interpretar a Ana Gorda provocó en mí una confrontación con mi parte oscura al mismo tiempo que lidiaba con mudarme de casa (otra vez) volver al Albergue porque el lugar que alquilé no resultó de la manera que me hubiera gustado, presenté una denuncia por acoso sexual, buscar casa otra vez, escuchar opiniones de “te lo dije” realmente no fue nada sencillo.

Después de dos semanas en mi segunda temporada en el Albergue encontré un lugar muy lindo al sur de la ciudad donde puedo estar con mis gatos sin ningún inconveniente, mis vecinos son agradables y justo llegó el confinamiento a Ciudad de México, lo que me permite disfrutar mi nuevo hogar y tomar ese descanso que mi cuerpo, mente y alma necesitaban. Yo sé que a muchas personas este tema del confinamiento no les ha caído bien, sé que es una situación compleja para muchas personas en todo el mundo, nadie está sólo en esto y precisamente por eso, estoy convencida de que está situación con toda seguridad nos permite poner en práctica nuestra responsabilidad como ciudadanos del mundo y nuestra empatía al quedarnos en casa, al hacer lo que nos toca. Caer en la histeria es lo más fácil. Tengo amigos que me dicen “Me preocupa que no estés preocupada” y ¿saben qué? No lo estoy por una simple razón: no quiero y no quiero porque no me sirve, no tiene sentido preocuparme, me haría daño mental y físico y eso no tiene sentido. Hago lo que está en mis manos, lo que me toca: me quedo en casa y estoy cien por ciento consciente de mi ánimo, de mis actitudes, de mis emociones, de utilizar cubre bocas cuando salgo al súper, de verle el lado bueno a la situación (sí, tiene algo bueno, les juro).

Antes de la pandemia podía hacer Home Office algunos días a la semana, ahora lo hago diario, me ejercito en casa, estoy con mis gatos, disfruto mi relación conmigo e incluso inicié una relación, así es: AMOR EN TIEMPOS DE COVID-19 porque al amor los virus le vienen poquito guangos. Recientemente mi Cucú (mi terapeuta) me preguntó si extrañaba algo o alguien durante esta cuarentena y mi respuesta fue contundente: NO, no extraño nada del mundo que dejé atrás cuando empezó la cuarentena, no extraño nada, ni a nadie porque para mí la cuarentena empezó cuando llegué a Ciudad de México al extrañar correr con tío Luis, con Maira, con Sam, con Alexandra y Marcelo y toda la dinámica. Escuchó muchas personas hablar o comentar en las redes sociales “cuando todo esto acabe…” o “cuando todo vuelva a la normalidad” y ¿saben qué? Esto no va a “terminar” esto es apenas el inicio de un nuevo comienzo en cuanto a relaciones, en formas y métodos, la normalidad nunca volverá a ser lo mismo que todos nosotros en cualquier parte del mundo conocimos antes de estar encerrados en nuestras casas, al menos esa es mi postura y mi deseo, que la nueva normalidad venga acompañada de reflexión, empatía, compasión, conciencia y mucho amor. Que al salir de nuestras casas no seamos los mismos que entramos.

En cualquier parte del mundo que estén leyendo esto, les mando un abrazo como dictan las nuevas normas: EN SANA DISTANCIA y por favor #QuedateEnCasa

 

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Ana Gorda: Sátira de una entrevista laboral

Después de casi dos meses de ausencia en este espacio y a pedido formal de la Asociación de Fanáticos de LCDI (lo correcto de lo incorrecto por sus siglas en español, obvio 💅) Aquí está de vuelta esta gustada sección de “¿Quiubole pus dónde andas?” que surge cada que desaparezco un poco en este universo… y ¿Qué pasó conmigo después de Perú? Pues sucede que una obra de teatro que escribí hace tiempo, digamos que por ahí del 2017 fue seleccionada para formar parte de la cartelera del foro Juana Cata en 2020 ¡Maravilloso! Sin embargo, les cuento las proféticas cuitas de esta obra.

Sucede que la noticia de que Ana Gorda, así se llama la obra, estaría en cartelera me llegó justo un día antes de salir a Perú, entonces desde allá estuve coordinando con el director la publicidad de la obra que se estrenaría el 2 de febrero; es decir que si empezaba ensayos el 2 de enero tendría un mes justo para ensayos, memoria del texto, trazo y publicidad. Danesh, el director y yo, nos pusimos manos a la obra, literal. A los quince días previos al estreno tuve una visión sumamente afortunada y se me ocurrió llamar a Netzeri Romero, compañera actriz que ha fungido como productora de una manera admirable en este proyecto. Todo iba muy bien hasta que el 6 de enero en plana partida de rosca me di cuenta de que el estreno de Ana Gorda sería justo la misma fecha que en México celebramos el día de la Candelaria que no es más un pretexto para seguir justificando la ingesta de carbohidratos en el primer trimestre del año, aunado a eso el Super Bowl y un fin de semana largo contra todo pronóstico Ana Gorda se estrenó con éxito y enfatizo ÉXITO porque tuvimos público. El siguiente fin de semana nuevamente competimos con la entrega de los Oscar e igualmente fue una función exitosa. El día de mañana se cumple un mes de estar en cartelera con esta obra y aunque al inicio ocupábamos dos días en cartelera: jueves y domingo, ahora estaremos sólo los jueves a las 20:30hrs con esta bella, divertida, semi traumática, catártica y profética puesta en escena que trata de manera satírica las entrevistas laborales. Los cuarenta minutos que dura la obra están sostenidos en Ana cuyo apellido es Gorda de Día y al presentarse deja claro que no adelgaza de noche evitando así la posible burla. Ana Gorda, es un monologo en cual se expone la vulnerabilidad de una mujer de mediana edad que sostenida en su apariencia física se niega a revelar su edad y que a lo largo de la entrevista deja ver las cicatrices emocionales de sus experiencias personales en sus relaciones amorosas, laborales, familiares, la fe en lo que sea menos en sí misma, su gusto por los gatos y las coincidencias como señal incuestionable por parte de un universo creado a partir de la esperanza en un futuro mejor.

Desde acá los invito a todos los que se encuentren en esta bella Ciudad de México a que nos acompañen el próximo jueves y todos los jueves de marzo de 2020 a que nos acompañen y se diviertan con Ana Gorda, aunque Natalie Imbruglia rezaba por ahí de los noventa que las ilusiones nunca se vuelven realidad con enorme placer les aseguro que eso es mentira que las ilusiones son pensamientos y… los pensamientos se pueden cambiar.

Marzo

 

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El poder de la presencia

Cada miércoles podrán encontrar la reseña del libro más reciente que haya tenido en mis piernas para que se animen a leer, discutir o de plano a tirarlos por la ventana.

Convencemos a los demás con nuestra presencia. 

Walt Whitman

Primera reseña empiernada de 2020 e iniciamos sin más preámbulo  con El poder de la presencia de Amy Cuddy sicóloga social famosa por la «pose de poder» y ¿cuál es esa pose? Pues nada más y nada menos que la pose que toma la Mujer Maravilla antes de salir a combatir contra los malos. Amy sugiere que sostener una posición de poder antes de cualquier evento importante ayuda a reafirmar la confianza perdida o minada por distintas situaciones a lo largo de nuestra vida. Cuy sugiere que sostener alguna posición de poder frente al espejo durante dos minutos, exacto, dos minutos. Tiempo en el que esta postura enviara a nuestro cerebro el mensaje de presencia necesaria para habitar el momento presente. 

Si bien la presencia es fácil de percibir no lo es tanto a la hora de definirla; sin embargo al momento de enfrentar cualquier situación estresante nuestro lenguaje corporal hablara por sí mismo de nuestros miedos más profundos y delatará no sólo lo que realmente pensamos, sino lo que sentimos en cualquier situación dada. Empoderar es hasta cierto punto una palabra de moda, si bien últimamente es ya una vocablo cotidiano, lo cierto es que por mucho repetirla no surtirá efecto activo hasta que ese poder al que aspiremos se manifieste a través de la acción. La mayor parte del tiempo tememos que tomar acción sobre algún aspecto de la vida, ya sea financiero, sentimental o profesional, ese temor está fundado en el miedo normalmente a no sentirse suficiente. Por ejemplo, en una entrevista de trabajo donde la mayoría de los aspirantes tiende a adoptar una postura de impotencia. 

El más poderoso es aquel que es dueño de sí mismo

Séneca

Es normal que los demás no sepan quienes somos, es natural y valido empero es una obligación conocerse a sí mismo y admitir las carencias, de ese modo nadie que venga a querer desacreditarnos tendrá cabida. El poder del autoconocimiento libera, es una verdad que al momento de verla de frente puede ser modificada; ya que sólo las verdades se pueden cambiar, las mentiras no. Al momento de tomar una decisión solemos pensar e incluso se aconseja que estas se tomen en confianza, sin embargo es hasta el momento que accionamos en la decisión cuando esta genera ese tan anhelado poder interior. Por ejemplo, viajar solo a un país desconocido. No es la decisión de hacerlo lo que empodera; sino acción de hacer.

A lo largo del libro Amy menciona la máxima fake it till you make it; además agrega «no lo fingas para lograrlo; sino para creerlo» el cuerpo no está separado del cerebro, si se empieza por adoptar una postura de poder, el cerebro recibirá la señal para afrontar cualquier situación estresante con presencia y poder. 

Les cuento recientemente me mudé de casa y la adaptación ha sido compleja; sin embargo adoptar esta sencilla recomendación ha facilitado muchísimo el proceso y hasta me permitió quedar seleccionada en un casting, así que a probar que si dos minutos de pose no cuestan nada y aportan mucho. 

Dejenme acá sus comentarios al probar la postura de poder e igualmente en el siguiente enlace podrán encontrar la conferencia de Amy Cuddy donde detalla más acerca del tema.  EL PODER DE LA PRESENCIA

 

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Gracias 2019

Mucho silencio desde la última publicación, pero ustedes comprenderán que estaba yo muy ocupada acá conociendo todo lo posible y cabe mencionar que igual estaba trabajando, o sea eso quita tiempo (#nocierto, Di, bueno #sícierto pero poquito jeje) La verdad es que me la he pasado genial en Lima, su gente, su comida deliciosa, sus lugares hermosos, su historia. Perú es un país mágico, realmente mágico y feliz de estar acá y estar sola con mi alma. Viajar solo siempre representa una especie de evolución, al menos para mí. Este viaje me representa más que un cierre de ciclos; sino una apertura a todas las cosas lindas que me han sucedido en la vida. Mucho tiempo caminé con la sensación de que hacia falta ser más delgada, más alta, más inteligente, menos chaparra, menos chichona (ajá menos) y la verdad es que a mí lo que me había sobrado era miedo, miedo a ser y hacer completamente lo que me diera la gana en total libertad de mí misma, de mi humanidad. Esta vez quiero compartirles sólo un poco de la generosidad que 2019 tuvo conmigo.

1.- La sección PIERNAS Y RESEÑAS. Nació este año y ha tenido muy bena respuesta por parte de todos los lectores. Al contrario de lo que se imaginan esta sección no es parte de mi vanidad. El año pasado estaba en Ecuador y cansada del viaje llegué al hotel y subí las piernas, me coloqué en las piernas el libro que estaba leyendo y tomé una foto, luego pensé “mmm se ve bien” y ahí se me ocurrió que yo leo mucho y podría hacer algo con eso. Al llegar a México escribí mi primera reseña con muchísimo miedo de los comentarios que pudieran surgir, muy por el contrario, a lo que imaginé recibí comentarios muy buenos y la mayoría sobre el texto, igualmente aprovecho para agradecer a todos sus cumplidos a mis extremidades inferiores y sobre todo por leer y recomendarme algunas lecturas. 2020 pinta todavía más lector y torneado, obvio.

2.- Maratón CDMX 2019. Este año me estrené como maratonista y al igual que con la sección PIERNAS Y RESEÑAS, me siento muy agradecida con mis extremidades inferiores. En 2011 sufrí un accidente que requirió tes años de mi paciencia y constancia para volver a caminar y de correr ni hablamos, incluso cabía la posibilidad de que un hoyo quedara como cicatriz en mi pierna derecha. Hoy mis piernas son portada, sirven de atril a varios libros y son las responsables de que el 25 de agosto después de cinco horas y quince minutos portara la medalla que me acredita como maratonista.

3.- Aprendí la diferencia entre el amor y la esperanza. 2019 me regaló experiencias maravillosas en el plano amoroso. Tuve la fortuna de conocer hombres espectaculares, hombres que me ayudaron a distinguir esa diferencia, hombres que salieron de mi vida en el plan amoroso, pero las experiencias que me regalaron se quedan conmigo y solo tengo para ellos un profundo agradecimiento. Hoy sé que no estoy sola, no me siento sola, estoy soletera y estar soltera está de moda, así dice el santo patrono del perreo intenso Daddy Yankee y yo le creo porque además lo dice con Bad Bunny y eso debe valer de algo.

4.- Me mude a CDMX.

5.- Una familia en el Albergue.

6.- Un empleo bien divertido y adictivo en una Torre Mayor.

7.- Amigos entrañables en todo mi mundo maravilloso a los que no conozco personalmente, pero están ahí, ves abuela, las relaciones de lejos sí funcionan.

8.- La carta de aceptación de una editorial para publicar mi libro de cuentos.

9.- Una película. Dicen que, si del cielo te caen limones, haz limonada, a mí se me cayó el techo e hice una película.

10.-Dos talleres de actuación en los que conocí gente extraordinaria y se convirtieron en amigos maravillosos que hicieron de esta época NANvideña en Perú un verdadero milagro navideño.

11.- Hice ejercicio todo el año, incluso aquí en Lima he ido al gym.

12.- Gané una convocatoria de dramaturgia y mi obra se presentará el próximo 2020, ahí les cuento para que vayan a verla.

13.-Empecé a escribir para una revista digital haciendo reseñas de películas.

14.- Le escribí una carta a la mujer más valiente de mi vida: mi mamá. Acá se las dejo LA MÁS VALIENTE

15.- Aprendí a dejar ir y a estar agradecida por todo, absolutamente todo.

16.- Leí 216 libros.

17.- Reforcé la confianza en mí.

18. 11,380 vistas a este sitio. Lo que significa el 70% más que el año pasado. MIL GRACIAS a todos por leer, por compartir, sin su apoyo nada de este incorrecto blog sería correcto. GRACIAS por estar acá un año más.

Y obviamente una Navidad maravillosa en Perú. Ya saben que yo solía hacer listas de mis propósitos para cada año, sin embargo, este 2019 sólo flui. No hice lista, no esperé nada, absolutamente nada, sólo acepté lo que me llegó. No digo que andaba como pérdida por la life, no, sólo estuve abierta a toda posibilidad. A que si quiero algo y no sale como yo había imaginado o de plano no sucede, está bien, así es perfecto. Con enorme orgullo y cansancio puedo decirles que todo 2019 estuve presente en mi propia vida, es muy cansador este ejercicio de la presencia, no es sencillo, pero a mí esto de la dificultad en cualquier cosa me vale poquito madres lo que me cueste, lo que me tarde, a mí lo que me ocupa es que sea posible, es todo lo que me importa, si es posible, ya chingué, así que vamos a ver que tantas posibilidades trae consigo 2020.

¡Feliz año nuevo para todos ustedes y nos leemos en 2020! 😃😉

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Feliz NAN…vidad🎄🎁✨

NaNvidad, NaNvidad, feliz NaNvidad

😊🎄🎁✨

Estoy tan feliz, tan emocionada de que hoy es Noche Buena y saldré a celebrar acá en Lima. Les cuento qué ha pasado en estos días que llevo acá viviendo mi experiencia peruana en la que ya me perdí, ya me puse borracha, tuve resaca y dos fuegos labiales.Ya les conté que LuisMi, me ayudó en relación con el hospedaje poniéndome en contacto con una amiga suya que se dedica a temas turísticos y acá estoy yo muy acá con mi computadora en las piernas trabajando desde una salida muy acogedora. El lugar es muy, muy lindo al final de esta nota les voy a dejar los datos del lugar y de Ethel por si un día les gustaría visitar Perú y pasarla tan lindo como yo en este lugar.Ya saben que salí el 21 de diciembre de México, entonces cuando hice la reservación le dije muy segura a Ethel que venía del 21 al 30 de diciembre y sí, pero la cosa es que yo llegaba a Perú el 22 y ahí está la cosa, pagué una noche de más 😬 lo bueno es que no tuve que esperar hasta la una para hacer el check in, Zaira, la recepcionista me vio y dijo “Pásate y duerme un rato” así andaba entre mi resfriado y la desvelada. La verdad es que lo que les pueda contar de mi estancia en este lugar es poco. Todos son muy amables y realmente tienen una vibra muy linda. Lo que me pasa en general es que no entiendo lo que dice la gente, sigo con los oídos tapados y no sé bien si los peruanos hablan bajito o de plano yo soy una escandalosa, pero total que casi todo el viaje me la he pasado en silencio y eso me agrada para ser honesta.El domingo que llegué, después de dormir, fui a patear el bote por esta bonita ciudad y conocí el Mercado Surquillo (que yo había entendido Zerquillo, o sea hasta lo entendí con Z jeje) La cochina gripa me hizo regresar a casa y a descansar porque en serio me sentía mal y hacía un poco de aire frío. Lo que me sorprendió es que es aquí está empezando el verano, sin embargo, Lima es una ciudad más bien nublada, o sea sí hace tipo bochorno, pero no hay sol, al menos no ahora, lo que está genial o de plano ya estaría sudandaaaaa como la puerca que soy.Ayer por fin tuve la fortuna de probar el ceviche peruano y les cuento que es una verdadera DE LI CIA, les juro, esa cosa sabe espectacular y ahí se me ocurrió probar el pisco sour por recomendación de Jonito, y ahí estoy yo a los dos tragos bien borracha, mi paladar canasta básica nomás no pudo apreciar la fortuna de la bebida, no se dejen influir por lo que digo del pisco sour, seguro es la hostia, pero a mí no me gustó porque no suelo beber y además el ceviche es una comida más bien ligera, era lo primer que había comido. Cuando me trajeron la cuenta me di cuenta de que el pisco lo sirvieron doble, o sea, ya iba yo muy mareada a caminar por el Parque del Amor que es el parque más lindo que he visto, me llamó la atención como en este país le dedicaron un espacio geográfico al amor, qué bello. Normalmente se encuentra uno en los parques monumentos erigidos a héroes de guerra, escritores, ciudadanos ilustres, pero ¿al amor? Me resulto muy bello.Me encuentro en el futuro, acá es una hora más que en mi México lindo y querido, iré a correr por el malecón antes de mi Huddle diario y luego me baño y me voy a pasar la más linda de mis NaNvidades, pero antes quiero agradecer a todos los que han hecho posible que me encuentre hoy acá:

Maira: Mil gracias por ser mi tarjeta de crédito con pies, amiga eres la best one.

LuisMi: Por ponerme en contacto con Ethel y tener un techo donde dormir, ser mi guía de turistas a distancia y por ser un amigo maravilloso.

Ethel: Te luciste, mujer, de verdad el lugar es bellísimo.

Zaira: Por recibirme con esa calidez tan linda y mandarme a dormir.

Jesucrista: Por cuidar a mis chicos mientras ando pateando el bote en Lima.

Felipe: Por confiar en mí y asegurarte de que coma en este lugar.

Diana: Por tu confianza infinita y permitir que trabajara remotamente, te juro estoy jalando muuuuucho 🤓

Carlos: (chico del hotel, no sé bien qué hace jeje) Por reservar por mí el paseo de hoy.

Y a todos los demás por leer estás crónicas NaNvideñas.

¡MIL GRACIAS A TODOS, DE VERDAD, MUCHÍSIMAS GRACIAS POR SER PARTE DE MI NAN…VIDAD!

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Ni amo, ni esclava

Termina el año y en mi opinión es muy sano realizar un análisis de lo ocurrido. En esta ocasión mi análisis va con relación a la situación amorosa. En publicaciones anteriores, tipo mediados de año, en este blog les compartí sobre un hombre al que llamaba “mi amo” y es el responsable de que yo esté hoy en este hermoso país que es Perú. Sucede que este señor y yo nos conocimos de manera remota, o sea a distancia. Yo trabajaba en una empresa y mis funciones eran realizar las facturas de las ventas que se realizaban en Chile, me auto llamé Facturera y “el amo” era la persona encargada básicamente de estar fregándome con que las facturas estuvieran en tiempo y forma. Tuvimos una relación de trabajo a distancia durante un año y cuatro meses. Fue una relación muy linda, muy divertida y edificante que pasó del plano profesional al personal. La verdadera razón por la que le llamé “amo” fue porque cada cierre de mes me traía como su esclava facturando y refacturando para alcanzar sus números. En ese empleo me habían dicho que iría a Chile, el amo fue Made in Chile, y nos ilusionaba le idea de conocernos, cabe mencionar que mientras trabajé ahí jamás hubo ni siquiera asomo de ligue porque:

  1. Yo estaba recién separada llorando como muñeca fea en cualquier rincón.
  2. Tengo como regla personal jamás involucrarme con algún compañero de trabajo… Ya cuando no lo son, bueno ahí la cosa cambia.

Total, que me traían como su mensa con eso de que “te vas a Chile” que al final ni se hizo y terminé mejor yo por irme de la empresa je je y en este momento el Amo, dijo “Nancy, voy de vacaciones a México ¿quiere ir?” Cabe mencionar que yo vivía en Guadalajara y él visitaba Ciudad de México. El dos de junio nos conocimos en el aeropuerto de la Ciudad México y de ahí pasamos unos días espectaculares acompañados de risas, comida(muuuuchaaaa), atención, un concierto en Bellas Artes, un posible atraco en la Plaza Garibaldi (“Amo, así no se saca la cartera” qué risa y hay vídeo 😂), un desacuerdo por una piña en el Mercado San Juan, unos aretes y mucha bebida (refresco en Chile). Conocer personalmente al Amo fue muy bello porque él es una bella persona. De ahí estuvimos en contacto y yo le comenté que la Navidad para mí es una fecha significativa, a él se le ocurrió volver a vernos e intentar una relación a distancia y yo dije “Pus órale” ajá sí nomás y ahí estuvimos comunicándonos y surgió el plan de este viaje para encontrarnos y que él me pidiera pololeo y yo dijera que sí, obvio… Sin embargo, la vida la mil de vueltas. Los meses pasaban, yo seguía mis entrenamientos para el maratón, viviendo en el Albergue, evitando comer azúcar, demasiada presión.

Mi abuelita decía que las relaciones de lejos son de pendejos, yo digo que #nocierto. Durante los meses que estuvimos en comunicación el Amo y yo la distancia tuvo una relevancia impresionante porque lo único que podíamos hacer era hablar y ahí fue cuando me di cuenta de que eso no tendría ni pies, ni cabeza. Me di cuenta de que los sentimientos son una cosa, las acciones otra, el sexo una cosa y el amor otra muy distinta. La distancia me ayudó a analizar detalladamente cada palabra, cada acción y como la canción “el tiempo pasa” y yo nomás en lugar de sentirme enamorada, me sentía presionada, atrapada en un celofán de complacencia justito como cuando estaba casada. En total responsabilidad de mí, de mis acciones y patrones, me dije “Nance, los olmos no dan peras, querida, you already know that” y decidí que esa relación de esclava y amo no pasaría al siguiente nivel de Mario Bros, pero el viaje ya estaba planeado, al menos el vuelo porque al salir el Amo del cast de mi vida, se fue con él el hospedaje. Casi pensé que no vendría porque pasaban los días y yo ocupada en trecientas cosas que ni había buscado hospedaje. Un buen día LuisMi (mi querido amigo adorado) me contactó para hacer una traducción, sucede que LuisMi es peruano, le conté mi tema con el hospedaje y después de cagarme por no haberle dicho antes, me puso en contacto con una amiga suya que me consiguió un lugar hermoso justo en el corazón de Miraflores, lugar que solo conocía por los libros de Mario Vargas Llosa. De esta aventura rescato que una cosa siempre lleva a otra, no siempre la que esperamos, pero definitivamente sí a una mucho mejor. La traducción por la que me contactó LuisMi no se concretó empero hoy tengo un bonito lugar donde dormir y LuisMi es mi guía de turistas a distancia je je 😬

Cuando surgió la idea de este viaje el Amo me dijo “Te voy a hacer pasar una Navidad como nunca la has pasado y vas a ser muy feliz, Nancy, te lo mereces”. La relación con el Amo no llegó a concretarse en un pololeo, incluso perdimos contacto; sin embargo, en mi corazón no hay espacio al arrepentimiento, ni la queja; me alegra mucho que haya sucedido lo que no sucedió y aun así siempre sucede lo mejor, lo perfecto. El Amo tenía razón, esta Navidad me la estoy pasando de maravilla. Es mi primera época NAN…VIDEÑA en armonía con el Universo y de manera perfecta. 🙏

La familia sí se escoge

21 de diciembre de 2019, el reloj marca 10:09pm. Estoy sentada en la sala número veinticinco del aeropuerto de la CDMX en espera de abordar el vuelo 2892 rumbo a Lima, Perú donde celebraré la próxima Navidad. Me siento muy feliz de saber que soy la afortunada de vivir una experiencia maravillosa en una tierra mágica, una tierra que jamás pensé visitar. Lloro como Magdalena, mis compañeros de vuelo me miran poco extrañados y me parece que esperan que no les toque viajar junto a mí las próximas cinco horas.

Sentada acá muchas imágenes de 2018 vienen a mi mente: Las Vegas, Ecuador, el aeropuerto de Guadalajara, la terminal dos del aeropuerto de la CDMX, una cena de prisa y un libro de Elmer Mendoza que narra la experiencia de una princesa que busca a salivazos al príncipe que la despierte de su letargo y en todos esos recuerdos solo mi sombra junto a mí y la profunda ansiedad que deriva del vacío.

Mañana se cumplirían seis meses de llegar a Albergue con mis dos maletas y mis tres gatos. Llegué una noche de del 22 de junio a la casa de Karina, alias Jesucrista. Bajé de una camioneta junto con Axel que me ayudó con mis chicos y al cruzar la puerta de esa casita, de la cuál pensé que iría en una semana máximo, crucé muchos umbrales de todo tipo. En esa casita, a la que yo llamé Albergue basada en una serie de televisión creada por Hank hace unos años, jamás imaginé que iba a recibir más que un techo y una cama donde dormir. En ese Albergue recibí aceptación, cariño, apoyo, agradecimiento, la sanación interna y externa, bullying (por mis calzonzotes, mis pijamas, mis calcetas, mis gustos musicales por Laura León) En esa casita de una planta, tres recámaras y un solo baño llegamos a vivir hasta seis personas, cuatro gatos y un perro sumadas todas visitas que llegaban de improvisto. Fue ahí donde me enseñaron a jugar Damas Chinas (no me gustó ni le entendí 😬) Fue ahí donde Juliana me adoptó como tía, la tía Nana, me convertí en la mana de muchas manas más. Ahí conocí las andanzas del Capitán y sus tenientes.

Fue en esa casita que me gradué como Asistente Gold de Jesucrista paseando perros, limpiando los areneros, yendo a la escuela por Juliana, al súper, a la lavandería, cargandole la bolsa n festival de Juliana, haciendo CrossFit casero cuando le da su «acá» y se pone a limpiar en la madrugada, pintando paredes y hasta el mismísimo pelo de Jesucrista que quedó de chocoflan 😬 (Mana, tú sabías que era mi primera vez, pero ya se te ve bien).

Casi seis meses de risas, llantos, amores pasajeros, confesiones nocturnas, desvelos innecesarios y mucho, mucho, mucho amor.

Esta vez no llegué sola ni física ni emocionalmente. Karina, Juliana y Aby me acompañaron, tomamos café, me desearon los mejor en este viaje y me lanzaron besos en el último filtro del aeropuerto. A mi regreso otra aventura me espera, otro espacio será mi casa y la de mis chicos empero el Albergue siempre será mi hogar y sus integrantes mi familia.

Todas las familias son disfuncionales, son raras, pelean, se tardan en el baño, y pueden ser insufribles… Sin embargo la familia se acepta y en ese Albergue se es familia sin importar las letras en el apellido ni el lazo sanguíneo.

En el Albergue la familia sí se escoge.

 

 

El Asco

Ya estamos en la recta final de 2019 y para cerrar muy bien y muy bonito esta ocasión les dejo acá la última reseña empiernada del año de 2019. Les quiero agradecer a todos ustedes lectores incorrectos que se hayan mantenido fieles a mis piernas 😉 Sé que desde que me mudé a Ciudad de México esta sección ha estado medio entumida y precisamente aprovecho este momento para agradecerles desde el fondo de mi alma lectora su constancia, comentarios y sugerencias. Les quiero agradecer muchísimo sus suscripciones, sus visitas y por supuesto que la hayan recomendado y lo sigan haciendo en 2020. No me alcanzan las palabras para agradecerles su curiosidad, admiración y ¿por qué no? Morbo por saber cuál sería la siguiente publicación que tendría en mis piernas, literalmente no me alcanzan porque ya es hora de pasar a lo que nos truje, sin embargo, en la siguiente publicación les cuento cómo nació esta bonita, gustada, culta y sexy sección.

 

Ahora sí con ustedes El Asco, escrito por Horacio Castellanos Mora que si bien nació en Honduras creció en El Salvador. El Asco fue publicado en 1997 y narra la experiencia de Thomas Bernhard de regreso a El Salvador para el funeral de su madre. El nombre que se menciona tanto en el título del libro como en su contenido son ficticios; es decir, que no es ni Thomas ni Vega; sino cualquier persona que regresa a la náusea inicial del lugar de nacimiento. Durante toda la narración Vega/Thomas le expresa a Moya; amigo suyo de la infancia, la repugnancia no sólo de estar ahí, sino de la convivencia con su familia. Ambos aspectos de la vida de Vega/Thomas exponen de manera esplendida el rechazo del personaje no hacia lo que ve, sino a lo que carga, lo que es y que será, aunque se haya ido del país donde nació, aunque no hable con su familia, aunque desprecie cada detalle de su país. Desde La Náusea de Jean-Paul Sartre no me había topado con un libro que a pesar del sentido negativo de su título y su contenido me tocara de manera tan profunda y bella. Si bien todo lo que expresado por Vega puede parecer una queja, esta proviene del dolor, de la impotencia, de la imposibilidad de escapar de sí mismo, del reconocimiento y la aceptación en la condición humana a la que nos debemos por el siempre hecho de ser humano. No tengo la fortuna todavía de visitar El Salvador, ni de comer pupusas, ni de probar su cerveza, de escuchar reír a su gente y sin embargo Moya no sólo despertó en mí el deseo de viajar y en cierta forma me llevó ahí con su narrativa. El Asco, es un texto que le provocará todo tipo de sensaciones estomacales, un texto que se lee con todos los sentidos. No me le saquen, no se dejen impresionar por el título porque Horacio Castellanos Mora es un escritor que merece mucho la pena, así que a cerrar este 2019 con una lectura muy empiernada. 😉🤓